También él se viste de novio

No sólo las novias se preocupan por su aspecto el día de su boda. Los novios son cada vez más presumidos y quieren estar a la altura de la novia en una ocasión tan especial. Las tendencias de moda que se presentan en los desfiles también están pensadas para ellos.

Novios con personalidad

Para las bodas de más etiqueta la norma recomienda usar chaqué si es de día, mientras que si la celebración es por la tarde-noche, es más adecuado el frac.

Pero para todos aquellos que quieran una ceremonia más informal y que prefieran un traje que puedan aprovechar más adelante las opciones son infinitas.

Si se quiere ir a la última moda, y la boda es en verano, los diseñadores recomiendan elegir colores claros como el beige, el gris claro o incluso, si se es muy atrevido, el blanco roto.

La camisa tiene que ir en consonancia con el color escogido para el traje. La corbata suele ser el complemento más común, aunque la pajarita también es una opción igualmente válida. Eso ya dependerá del gusto personal de cada uno.

De todos modos, independientemente de lo que marquen las tendencias, los novios pueden ponerse el traje que más vaya con su estilo. Por eso siempre estará bien visto elegir colores clásicos como el negro, el gris marengo, el marrón caramelo o el azul noche. En estos casos, serán los complementos los que proporcionarán un tono determinado al conjunto. Una corbata gris plata le dará un aire solemne y serio, mientras que una de un color más alegre como el amarillo pálido, el rojo rubí o el azul tornasolado denotarán un aire juvenil y desenfadado.

El corte del traje irá en función del estilo del novio. Tiene que escoger aquel con el que se sienta más cómodo. Así seguro que volverá a utilizarlo. Las levitas, por ejemplo, favorecen a los hombres altos y las americanas de cinco botones (son las que quedan cerradas hasta el pecho) son adecuadas para los más modernos. En cuanto a los complementos, igual que en el caso de las novias, lo mejor es no abusar de las joyas. Lo ideal sería llevar sólo el reloj y los gemelos y, quien quiera, la aguja de corbata.

De la revista "Casarse en Levante", año 4, nº 8

Consejos para él

El novio de hoy quiere vestirse de forma elegante pero sin renunciar a la comodidad ni a su estilo propio: no quiere ir disfrazado. Para ello, es básico que a la hora de elegir el traje con el que contraerá matrimonio tenga en cuenta algunos factores.

• El traje debe ser preferiblemente de un color oscuro como el negro, el gris marengo o el marrón carmelita, porque de esta forma lo podrá lucir en cualquier ocasión. Los colores estridentes o que se ponen de moda temporalmente se ven anticuados con el tiempo.
• El corte debe ser impecable, sólo así quedará bien siempre, y si puede ser hecho a medida, mucho mejor. La ocasión lo merece.
• La tela elegida tiene que ser de buena calidad, que resista a los lavados (siempre en tintorería) y al paso del tiempo. Es básico que tenga una buena caída para que realmente siente bien. Y tanto el pantalón como la americana deben ser del mismo color y del mismo tejido (o coordinados).
• Hay que procurar que las mangas sean lo suficientemente largas para cubrir el brazo completamente, pero que dejen ver parte de la camisa, ya que en esas ocasiones se suelen utilizar los gemelos.
• Los pantalones deben cubrir el zapato hasta el talón. No pueden quedar demasiado largos ni demasiado cortos, porque dan un aspecto descuidado. La raya debe estar perfectamente marcada.
• La corbata (si no se usa otra opción como pajarita, etc.) debe llegar hasta el borde del pantalón, ni más ni menos. Debe combinar con el traje. No deben elegirse con estampados chillones ni con los protagonistas de dibujos animados o de cómic favoritos.
• En el ojal de la americana no puede faltar una flor que haga juego con las flores del ramo de la novia, mejor si es de un color claro, como el blanco, el beige o el crudo.
• En un día tan importante no se puede arriesgar, por lo que no es aconsejable un cambio de look de última hora.

Eso sí, sobre estos consejos básicos, siempre tienen que prevalecer los gustos del novio, ya que al fin y al cabo va a ser él quien va a lucir el traje, aunque se deje asesorar por los profesionales del sector. Debe sentirse, ante todos, cómodo y seguro, de lo contrario no estará a gusto y ello quedará reflejado en las fotos.

De la revista "Casarse en Levante", año 4, nº 7